Hotel Mercure Deauville Centro 4 estrellas

Muy buena la ubicacion del hotel. La atencion tambien muy buena, el cuarto no es tan grande pero es igualmente comodo. Tiene garage.

Hotel muy recomendable por su calidad-precio. Habitaciones amplias con terraza y vistas al jardin(muy tranquilas)o al puerto.Camas muy cómodas y cuarto de bańo amplio.Destacar la limpieza de las habitaciones.Situacion muy céntrica.Personal agradable.Muy buena opción para Deauville.

El hotel se encuentra en una ubicación muy buena con fácil aparcamiento y con todas las necesidades cerca como tiendas, restaurantes y playa. Además había un mercadillo ambulante diario con alimentos como ftutas, verduras, quesos..

Sinceramente me esperaba más del hotel. La ciudad es muy bonita, su ubicación es buena y la arquitectura es preciosa, pero sin embargo el hotel no es para tanto. No está mal, no hay nada negativo que destacar especialmente, pero a mi me dejó algo frío. El personal de recepción es muy correcto. El hotel parece pequeño, aunque como digo el edificio es muy bonito, como se aprecia en las fotos. Está ubicado en una calle sin vistas, pero cerca de todo lo interesante de la ciudad, que se visita casi en un par de horas. La habitación me pareció algo reducida. El mobiliario en general es correcto, pero con aspecto algo vetusto. Hay muy poca luz en la habitación, en general y poca iluminación, lo cual es algo generalizado en los Mercure que visito en Francia. La tv es grande, pero no me resultó con tan buena calidad de visión como el día anterior en otro hotel de Le Havre. El baño está todo junto, con lo que se ahorra espacio, y es correcto. Todo está muy limpio y en perfecto estado. En la habitación hay además una botella de agua, café y galletas gratuitas, que son un buen detalle. La cama me resultó muy calurosa. Sólo pasé una noche, pero no dormí bien. Las almohadas son demasiado pequeñas para mi (es para gustos) y pasé demasiado calor con el plástico debajo de las sábanas. En todo caso, creo que son percepciones personales que no tienen por qué afectar a otros. El desayuno es correcto, en una sala del primer piso correcta, pero agradable. Todo muy bueno, pero sin destacar especialmente sobre otros lugares de la cadena Mercure. En definitiva, es un hotel correcto, sin nada destacable ni por bueno ni por malo.

El edificio es una buena muestra de arquitectura típica de Normandía y la situación es muy céntrica pero en el interior el mantenimiento deja algo que desear, la habitación en la que nos alojamos daba la impresión de haber conocido mejores tiempos. Nos alojamos en una habitación tipo dúplex, a priori una buena opción, pero no tenía aire acondicionado y en el piso superior hacía mucho calor. Otro inconveniente es la costumbre francesa de separar baño y WC que en este caso están en pisos distintos.