Disfruta de Sevilla con niños y crea recuerdos inolvidables en familia

Sevilla es una ciudad repleta de encantos, rodeada de naturaleza y con una oferta variada de actividades que se adaptan a todos los gustos y edades. Tanto si prefieres explorar sus barrios con solera a pie, en bici o incluso en calesa, como dar un paseo por el Guadalquivir en barco o relajarte en sus históricos jardines, explorar Sevilla con niños te permite conocer el alma de esta alegre ciudad desde un punto de vista no solo original, sino también inolvidable. Descubre una serie de planes e ideas para vivir esta experiencia en familia y, además, te proponemos tres importantes fiestas populares con un entrañable ambiente familiar, para disfrutar tanto de día como de noche junto a lugareños y turistas por igual.

Empieza tu recorrido monumental a pie. La catedral de Sevilla y la Giralda ofrecen material didáctico para visitas en familia, y el Alcázar proporciona una audioguía para niños con juegos e historias para que aprendan y se diviertan entre fuentes y jardines. Si los peques se cansan de andar, puedes dar un paseo en tuctuc o en tren turístico, ideales también cuando aprieta el calor. No te pierdas las Setas de Sevilla, la estructura de madera más grande del mundo, una espectacular pasarela con vistas urbanas a 26 metros de altura.

Empieza tu recorrido monumental a pie. La catedral de Sevilla y la Giralda ofrecen material didáctico para visitas en familia, y el Alcázar proporciona una audioguía para niños con juegos e historias para que aprendan y se diviertan entre fuentes y jardines. Si los peques se cansan de andar, puedes dar un paseo en tuctuc o en tren turístico, ideales también cuando aprieta el calor. No te pierdas las Setas de Sevilla, la estructura de madera más grande del mundo, una espectacular pasarela con vistas urbanas a 26 metros de altura.

¿Qué te parece pasear entre tiburones, medusas y tortugas gigantes sin siquiera mojarte? Sumérgete nueve metros en el Oceanario del acuario de Sevilla y da una vuelta al mundo marino. Por otro lado, un crucero por el Guadalquivir es una experiencia imprescindible si viajas a Sevilla con niños. Zarpa al atardecer y déjate envolver por la suave brisa fluvial y la mágica iluminación nocturna del puente de Triana y la torre del Oro. Para una experiencia más inmersiva y totalmente segura, atrévete a hacer pádel surf o kayak en el Guadalquivir con un instructor experto; pueden participar niños de 6 años en adelante. Asimismo, el parque acuático Agua Mágica, dentro del recinto de Isla Mágica, es sinónimo de diversión en familia. Con atracciones, zonas de hamacas y multitud de piscinas y toboganes, el parque también ofrece espectáculos infantiles. Compra la entrada online y aprovecha las promociones.

Los niños pueden divertirse y aprender al mismo tiempo en museos interactivos, además de fomentar su creatividad. Visita la Casa de la Ciencia en el Pabellón de Perú, donde pueden ver, tocar y participar en talleres sobre astronomía o geología. Las más de 60 experiencias sensoriales del Museo de las Ilusiones, con entradas familiares, harán volar la imaginación de los niños y dejarán muchas fotos divertidas para el recuerdo. Para los futboleros, los dos equipos locales organizan recorridos interactivos en sus estadios, el Benito Villamarín y el Ramón Sánchez-Pizjuán. Frente a este último se encuentra el Novotel Sevilla, un hotel ideal para visitar Sevilla con niños, con piscina, zona de juegos y habitaciones familiares.

El flamenco, declarado patrimonio de la humanidad, forma parte integral en la cultura de la capital andaluza. Una de las actividades más originales para hacer en Sevilla con niños es precisamente sacar a relucir vuestro duende. Visita el Museo del Baile Flamenco, situado en una magnífica casa señorial en el barrio de Santa Cruz. Cuenta, entre otros, con una colorida exhibición de trajes y la posibilidad de asistir a un íntimo espectáculo de flamenco en formato corto para acercar este arte a los más pequeños. Además, ofrece precios especiales para niños. Otra opción para conocer la ciudad y su historia, muy dinámica e interactiva, consiste en hacer una ruta guiada teatralizada. Existen varias agencias que ofrecen recorridos temáticos muy creativos, de alrededor de una hora de duración y adaptados a todas las edades, con actores que narran historias fascinantes, se visten de piratas o hasta hacen trucos de magia.

La campiña sevillana es amplia y llana, ideal para iniciar a los más pequeños en el senderismo. Visita la localidad de El Ronquillo, a unos 40 minutos en coche al norte de la ciudad, y recorre la Vía Verde, una antigua vía de ferrocarril de unos 9 km junto al embalse de La Minilla. ¡Es perfecta para pasear en bicicleta! No dejes de visitar la Granja Aventura El Ronquillo, con sus simpáticos animales y toboganes gigantes. En la Sierra Norte de Sevilla se encuentran las cascadas del Huéznar, a algo más de hora y media en coche al norte de Sevilla. A través de un fácil sendero boscoso, llegarás a pozas y saltos de agua impresionantes. La zona es mágica, pero el baño está prohibido; para ello, acércate a la playa fluvial de San Nicolás del Puerto, a solo tres minutos en coche, junto a un bonito puente romano.

Explorar Sevilla con niños no tiene por qué limitarse a paseos tranquilos junto al río; atrévete con deportes de aventura en familia. Los amantes de la escalada pueden visitar el Rock & Wall Climbing, el rocódromo más grande de Andalucía, con instructores y el equipo de seguridad necesario. Recuerda que los menores entre 6 y 14 años deben escalar con un adulto. Si les gusta saltar por los aires, Crazy Zone es el parque de trampolines más grande de Europa, con zona infantil, circuito ninja y piscina de bolas. Para acceder, compra un bono y los calcetines de la marca. Otra opción, a 25 minutos en coche al oeste de Sevilla, es el Bosque Suspendido, un parque de atracciones con tirolinas, escalada de árboles, paintball, tiro con arco, etc. La edad mínima es 4 años y hay actividades para todos los niveles de adrenalina.

La ciudad se viste de faralaes en la segunda mitad de abril, una época maravillosa para visitar Sevilla con niños. Un paseo por la calle del Infierno sacará el niño que todos llevamos dentro. Plagada de cacharritos, tómbolas, puestos de comida, luces, música… pura fantasía. Es una zona amplia y concurrida, así que es recomendable que los pequeños lleven una pulsera identificativa por si se extravían y establecer puntos de encuentro; si lo prefieres, las mañanas son más tranquilas. Haz una parada en alguna caseta para descansar, comer y disfrutar de la música, y repón fuerzas con unos buñuelos o un algodón de azúcar.

Se trata del festival de circo contemporáneo más extenso de España, celebrado en junio durante tres a cuatro semanas. Los espectáculos nacionales e internacionales, la mayoría gratuitos, se reparten en varios recintos y espacios abiertos de la ciudad, como Las Setas o el parque del Alamillo. Aquí, los niños son los grandes protagonistas, y podrás disfrutar de una fantástica jornada en familia con acrobacias, malabares, payasos, talleres y muchas risas. Planifica tu visita, y lleva agua y gorras para protegeros del sol al aire libre.

Estas curiosas festividades nocturnas de verano y principios de otoño tienen su origen en romerías y fiestas patronales, y están ligadas a distintos barrios. Las calles se iluminan con velas y farolillos, hay música y flamenco, y también es una ocasión fantástica para que los más pequeños prueben la gastronomía local, como las avellanas verdes y las sardinas asadas. Entre todas destaca la emblemática Velá de Triana en honor a Santa Ana, célebre por su cucaña en el Guadalquivir. Tiene más de 700 años de antigüedad y se celebra en torno al 26 de julio, cuando las calles del barrio se adornan de velas para dar sombra.

Descubrir Sevilla con niños puede regalarte los recuerdos en familia más divertidos y entrañables. Lo más importante es conocer bien los gustos de tus hijos, planificar de antemano y, sobre todo, adaptarte y ser flexible. Prepárate para vivir una experiencia inolvidable con los más pequeños.