Día 1: inmersión en la cultura clásica
Puesto que no hay tiempo que perder, lo mejor es dedicar el primer día a los orígenes de la ciudad y de toda una civilización. Un viaje en el tiempo en el que no pueden faltar:
• Acrópolis de Atenas
El Panteón, su edificio más representativo, es prácticamente visible desde todos los puntos de la ciudad. En lo alto de esta colina se encuentra el germen de la urbe. La relevancia política, social y cultural de este conjunto monumental se refleja en otras construcciones emblemáticas como el Templo de Atenea Niké, el Propileos y el Erecteion.
• Teatro de Dionisio y Odeón de Herodes Ático
Descendiendo por la colina de la Acrópolis por su vertiente sur, encontrarás primero los restos del que fuera el mayor teatro de toda la Grecia clásica, el Teatro de Dionisio, con capacidad para 17.000 espectadores. Si continúas el descenso por este mismo camino no tardarás en toparte con el Odeón de Herodes, otro de los puntos clave de la vida cultural en la Antigüedad.
• Ágora antigua y Biblioteca de Adriano
Ya a los pies de la Acrópolis puedes tomar la calle Adrianou para dirigirte al Ágora antigua, el que corazón de la ciudad hace 2.500 años. La Stoa de Átalo, edificio que alberga el Museo del Ágora, se reconstruyó tras las excavaciones iniciadas a mediados del siglo XIX y alberga una interesante colección de monedas, joyas, armas y cerámicas. Si continúas la ruta por la calle Adrianou llegarás hasta la Biblioteca de Adriano. Aunque solo quedan en pie muy pocas de las cien columnas corintias del edificio, este fue un destacado centro de convenciones, con una enorme sala de lectura y una extensa colección de libros.
• Monastiraki y Plaka
Las calles de los barrios más antiguos de la ciudad, el de Monastiraki y el de Plaka, donde se encuentra la catedral de Atenas, son un lugar estupendo para terminar la jornada. Sentarte en un café, reponer fuerzas con un buen suvlaki o un gyro, y hacer compras en la calle Ermou o los mercadillos cercanos son un gran broche final.
Día 2: una visión más actual de Atenas
El segundo día no hace falta madrugar. Seguro que has descansado muy a gusto en tu habitación del hotel Novotel Athenes y tras la intensa jornada de ayer te mereces quedarte un rato más entre las sábanas. Una vez que te encuentres listo para comenzar el día, aquí tienes algunas sugerencias para hoy:
• Kolonaki
Conoce la cara más elegante de la ciudad en uno de sus barrios más lujosos. Kolonaki se caracteriza por sus edificios señoriales de arquitectura neoclásica y modernista, refinadas cafeterías, distinguidas galerías de arte y sensacionales boutiques. Si te quedaste con ganas de seguir ahondando en la historia de Grecia puedes pasarte por el Museo Benaki.
• Cambio de guardia en el Parlamento
El barrio de Kolonaki se extiende por la parte norte de la Plaza Syntagma, donde se encuentra el Parlamento. Aquí, cada día y a la hora en punto, se produce el tradicional cambio de guardia. El acto es mucho más ceremonioso y llamativo los domingos a las 11 de la mañana.
• Jardines Nacionales de Atenas zápeion
La parte trasera de la Plaza Syntagma y el Parlamento la ocupan los Jardines Nacionales de Atenas. Paseando entre sus innumerables especies botánicas te puedes encontrar desde patos hasta tortugas y pavos reales campando a sus anchas. En la parte sur se erige un elegante edificio, el Záppeion, inaugurado a finales del siglo XIX y empleado en la actualidad como centro de conferencias y exposiciones. A no mucha distancia tienes el Estadio Panatenaico, donde se celebraron los primeros Juegos Olímpicos de nuestra era entre 1869 y 1870.
