¿Qué biblioteca de Praga visitar? Descubre estos tres lugares mágicos

Albert Einstein dijo una vez: «Lo único que hay que saber es dónde está la biblioteca». También en Praga. Al menos, si en tu recorrido turístico por la Ciudad Dorada a orillas del Moldava incluyes en tu lista de deseos los magníficos templos del libro. La recompensa está garantizada, ya que no solo podrás contemplar tesoros literarios centenarios y techos decorados de manera opulenta, sino que también te sumergirás en un mundo que, alejado del bullicio de la capital, invita a bajar el ritmo y dejarse hechizar por tiempos ya pasados. Lánzate a hacer un recorrido por lugares de Praga donde el tiempo parece haberse detenido.

En el corazón del casco antiguo, a pocos pasos del concurrido puente de Carlos, se alza el majestuoso Klementinum, el segundo complejo arquitectónico más grande de la ciudad después del castillo de Praga. Al entrar, se podría creer que se entra en un mundo donde el tiempo y el espacio siguen sus propias leyes. Sus venerables salas, que en su día fueron un colegio jesuita y durante siglos un centro de erudición europea, albergan uno de los tesoros más valiosos de la ciudad: la Biblioteca Nacional de la República Checa (Národní knihovna České republiky). Muchos consideran que esta biblioteca de Praga es una de las más bellas del mundo, y lo cierto es que su suntuosa sala barroca, con ventanas decoradas con estucos, ornamentos dorados y globos terráqueos, así como artísticos frescos en el techo, es un auténtico deleite para la vista.

Cuenta la leyenda que los jesuitas poseían un único libro cuando comenzaron a construir esta biblioteca en Praga en 1556. Hoy en día, la colección de la Biblioteca Nacional supera los siete millones de ejemplares, entre ellos valiosos manuscritos y grabados poco comunes. 27 000 volúmenes, muchos de ellos ediciones originales encuadernadas en cuero de los siglos XVII y XVIII, entre los que se encuentran escritos de Kepler, adornan las estanterías ricamente decoradas de la sala barroca de la biblioteca, que se eleva en varios niveles con balcones dorados forjados de manera exquisita.

Lamentablemente, la sala abovedada solo puede admirarse desde lejos, pero basta con asomarse para sobrecogerse y dejarse cautivar por la pintura ilusoria de la cúpula: el Templo de la Sabiduría de Jan Hiebel. En el centro de la sala se alinean globos dorados. Y cuando el aroma del cuero y del papel antiguo te envuelve, no cuesta imaginar a los eruditos que antaño intentaban descifrar el mundo entre murmullos suaves y el susurro del pergamino.

Información práctica:

• Abierta de lunes a sábado, de octubre a marzo, de 9:00 a 19:00; de abril a septiembre, de 9:00 a 20:00.
• Entrada: 380 Kč (aprox. 16 €).
• Varias veces al día se organizan visitas guiadas por la biblioteca y la torre astronómica, entre otros lugares.

Si visitas el Klementinum, reserva algo más de tiempo para recorrer todo el complejo con sus idílicos patios interiores. Al fin y al cabo, Albert Einstein enseñó aquí y Wolfgang Amadeus Mozart ofreció varias representaciones. El conjunto arquitectónico en sí mismo es una auténtica obra de arte. Desde la torre astronómica puedes disfrutar de una vista fantástica de Praga. En la llamada Sala del Meridiano, los eruditos antiguamente elaboraban mediciones y cálculos astronómicos. Y en la Sala de los Espejos, de color rosa, se pueden escuchar de manera habitual conciertos de jazz y música clásica. Infórmate con antelación para disfrutar de uno de estos eventos durante tu visita. Gracias a su ubicación en el casco antiguo, una parada en esta biblioteca de Praga se combina de maravilla con una ruta turística.

No muy lejos del castillo de Praga, en el barrio de Malá Strana, se esconde tras antiguos muros monásticos una de las bibliotecas barrocas más hermosas de la ciudad. Y si haces caso a los lugareños, no deberías perdértela durante tu estancia en la capital checa. ¿Por qué no combinar la subida al Hradčany para hacer una breve parada en el monasterio premonstratense de Strahov (Strahovský klášter)? A través de una elegante puerta barroca coronada por la estatua de san Norberto, accede al monasterio, fundado en el siglo XII y considerado hoy uno de los más antiguos de toda la República Checa. Todavía viven allí monjes que reciben a los visitantes.

Durante un paseo por el enorme recinto monástico, los tesoros culturales te acompañarán a cada paso: la iglesia de San Roque; la iglesia de la Asunción de María, en la que se dice que Mozart tocó el órgano; la galería de pintura de Strahov; y la impresionante biblioteca con sus aproximadamente 200 000 volúmenes que, sin duda, te deslumbrará con su esplendor barroco. Y es que la arquitectura barroca, las suntuosas salas de lectura y las importantes colecciones históricas no solo hacen latir más rápido el corazón de amantes de la arquitectura o de los libros.

El punto culminante del monasterio es, sin lugar a duda, su biblioteca barroca, que comprende dos magníficas salas y se encuentra en un edificio de estilo neoclásico no muy lejos del resto de dependencias. Aunque no está permitido entrar a las hermosas salas de la biblioteca y solo se pueden contemplar desde detrás de un cordón de seguridad, el pasillo que conecta ambas salas guarda algunas sorpresas: en el gabinete de las curiosidades podrás ver de cerca valiosos manuscritos, globos terráqueos, mapas, colecciones extrañas y fósiles que en su día sirvieron para la investigación científica.

Información práctica:

• Strahovské nádvoří 1/132; se puede llegar con el tranvía 22 (parada de Pohořelec).
• Abierta de lunes a domingo de 9:00 a 17:00.
• Visita a ambas bibliotecas: 190 Kč (con descuento 90 Kč) o unos 8 €; con la galería de pintura 340 Kč (con descuento 190 Kč) o unos 14 €.

Comienza tu recorrido por esta biblioteca de Praga en la Sala Filosófica (Filosofický sál). Aquí podrás seguir la historia espiritual de la humanidad, comenzando por Adán y Eva, mientras dejas vagar la mirada por el monumental fresco del techo, una obra tardía de Franz Anton Maulbertsch, uno de los pintores más destacados del barroco tardío austriaco. Azules, dorados y suaves tonos pastel se entrelazan, y elementos de estuco magistralmente trabajados enmarcan las magníficas pinturas del techo. Más de un visitante se queda sin palabras ante la majestuosidad de esta sala imponente. Las estanterías de madera noble de nogal, con una decoración sublime, se extienden a lo largo de dos pisos con galerías elevadas, en las que se alinean uno tras otro volúmenes encuadernados en cuero con adornos dorados.

La Sala Filosófica alberga más de 42 000 volúmenes de matemáticas, física, astronomía, arte, poesía e historia. Con un poco de suerte, podrás echarle un vistazo al delicado armario situado a la izquierda de la biblioteca. En él se guarda el regalo de María Luisa, esposa de Napoleón Bonaparte, que era una apasionada coleccionista y legó a la Biblioteca de Strahov en Praga valiosos escritos científicos y literarios, a menudo con magníficas encuadernaciones.

A través de un pasillo se accede a la Sala Teológica (Teologický sál), construida entre 1671 y 1674. En la parte más antigua de la actual biblioteca de Praga predominan los colores cálidos y elegantes. En las estanterías revestidas de madera, que ocupan toda la sala, hay más de 18 000 volúmenes apilados. Se trata principalmente de escritos teológicos, aunque la pared norte está adornada exclusivamente con ediciones históricas de la Biblia en diferentes idiomas. Al adentrar la mirada en la sala, esta se dirige inevitablemente hacia la imponente bóveda del techo, con sus elaborados trabajos de estuco y magistrales frescos que representan escenas religiosas y alegóricas. La conexión con los maestros del barroco italiano es inconfundible. Entre las hileras de libros se encuentran herramientas bibliotecarias, mapas y globos terráqueos medievales. Cuando la luz cálida inunda la sala, revela su verdadera magnificencia.

Información práctica:

• Strahovské nádvoří 301
• Abierta de lunes a domingo de 10:00 a 22:00.

Muy cerca de la Biblioteca Nacional de Praga, algunos días se forman colas delante del edificio principal de la Biblioteca Municipal (Městská knihovna v Praze). Sin embargo, es probable que poca gente planee hacer alguna consulta en la gran sala de lectura. Más bien, lo que ha despertado su curiosidad es una torre hecha de libros. La Biblioteca Municipal de Praga es famosa sobre todo por su escultura de libros de grandes dimensiones. La instalación, llamada Idiom o «Columna del conocimiento», fue creada por el artista eslovaco Matej Krén en 1998: miles de libros apilados con sumo cuidado en una torre circular que parece crecer hasta el infinito. Las obras de Krén suelen girar en torno a los libros y el conocimiento ilimitado que estos proporcionan. Quien haya contemplado alguna vez esta instalación, que alcanza el techo y está compuesta por miles de libros de todas las formas, colores, tamaños e idiomas, comprenderá rápidamente por qué muchas personas están dispuestas a esperar hasta una hora para verla.

En el centro de la torre de libros apilados hay un estrecho pasadizo por el que se puede mirar hacia arriba. En la parte superior e inferior del túnel, Krén instaló espejos que crean la perfecta ilusión de un túnel de libros infinitamente largo. Precisamente por este juego con la percepción, la torre de libros es probablemente uno de los lugares más fotografiados de la capital checa, y merece la pena visitarla.

Información práctica:

• Mariánské náměstí 1/98
• Abierta: lunes de 13:00 a 20:00; de martes a viernes de 9:00 a 20:00; sábados y domingos de 10:00 a 18:00.