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Rincones de la sierra de Málaga para conocer en familia

¿Sabías que el 30% de la superficie de Málaga está ocupado por espacios naturales protegidos? Aquí hay mucho territorio por explorar y la idea de hacerlo en familia se presenta como un plan muy apetecible en cualquier época del año. Para que no te pierdas en el amplio mapa de alternativas que ofrece la provincia, aquí tienes algunas ideas para descubrir la sierra de Málaga con niños.

¿Por qué elegir Málaga como destino con niños?

Hablando estrictamente en números, la provincia de Málaga ocupa la superficie más pequeña de toda Andalucía. Pero las cifras no le restan encanto a un paisaje cuya belleza se concentra en menos espacio y que, por lo tanto, es más sencilla de recorrer.

Es una de las grandes ventajas de visitar Málaga con niños. Los lugares de interés son más accesibles, las distancias son más cortas y puedes establecer el campamento base en lugares como el hotel Novotel Suites Málaga Centro y desde allí desplazarte hacia los parajes más atractivos.

Parques naturales, enclaves históricos, espacios geológicos de gran belleza… Hay muchos destinos dentro de Málaga que harán que las vacaciones en familia sean divertidas y educativas para todos.

4 pueblos de la sierra malagueña para visitar en familia

Nerja. Este pequeño pueblecito a los pies de la Reserva Natural de la Sierra de la Almijara y Sierra Tejeda está repleto de encantos. Es una localidad turística con mucho ambiente, especialmente durante los meses de verano. Pero fuera de la temporada estival también presenta grandes atractivos para toda la familia. No muy lejos de esta localidad costera se pueden visitar lugares de gran interés como la Cueva de Nerja y sus preciosas grutas iluminadas, o el imponente Acueducto del Águila y sus cuatro pisos de arcos que alcanzan una altura aproximada de 40 metros.

Casarabonela. Es un pueblo de apenas 2.500 habitantes al abrigo de la Sierra de las Nieves. Este paisaje natural es una de las grandes joyas de la provincia, tanto por la diversidad de su flora y su fauna como por su exuberante belleza geológica. El pueblo de Casarabonela es un bonito paraje para hacer una parada antes de introducirse en la sierra y pasear entre bosques de pinsapos, encinas o alcornoques con las esperanza de ver alguna de las numerosas cabras montesas que habitan estas tierras.

Istán. En la falda sur de la Sierra de las Nieves, a mitad de camino entre sus impactantes picos y las cálidas aguas del Mediterráneo, hay un pequeño pueblo de casas blancas cuyos orígenes se remontan a siglo XV. Es Istán, popularmente conocido como el ‘Manantial de la Costa del Sol’. Su extensa red de senderos permite llegar a parajes excepcionales como el Embalse de la Concepción, el Charco del Canalón y las Sierras Blanca y Real, siguiendo las acequias moriscas que abastecieron al pueblo hace más de quinientos años.

Ronda. Dentro de los destinos de interior, este pueblo en lo alto de un imponente desfiladero es uno de los más populares.  Y es que Ronda tiene una ubicación perfecta para conocer lo más hermoso del paisaje rural malagueño: al oeste la Sierra de Grazalema, al sur el Valle del Genal, al este la Sierra de las Nieves y al norte las extensas llanuras que conducen hacia Córdoba. Sea cual sea la dirección que tomes, a muy pocos kilómetros del centro histórico de esta localidad atravesada por el río Guadalevín, te encontrarás ya inmerso en un paisaje de gran belleza natural. Y si el día no está para la práctica de senderismo, siempre os podréis quedar por el pueblo y visitando sus puentes, los Jardines de Cuenca o los baños árabes, en los que los visitantes del siglo XIII estaban obligados a purificarse antes de entrar en la ciudad.

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