¿Por qué se han hecho tan populares los veranos en Cerdeña?
No siempre es necesario tener un plan de viaje 100 % programado. Parte del encanto de viajar a Cerdeña es que no necesitas tenerlo todo previsto para disfrutar de unas estupendas vacaciones. Esta isla tiene mucho flow y lo mejor que puedes hacer es dejarte llevar durante tu estancia. Con que tengas asegurada tu reserva en el hotel Mercure Olbia, todo lo demás irá sobre ruedas.
Hacer una escapada de verano a Cerdeña es apostar por un destino accesible, sin complicaciones y con infinidad de planes que te permitirán disfrutar plenamente de los encantos de la isla. Hay muchos motivos por los que al final de tu estancia estarás suspirando de amor por este rincón del Mediterráneo, pero te los resumimos en estas 7 razones para visitar Cerdeña.
1. 55 km de playas paradisíacas
¿Pensabas que el nombre de Costa Esmeralda era algo casual? La tarjeta de presentación de Cerdeña son sus 55 kilómetros de playas de arena blanca y aguas de color verde azulado que tienen un efecto cautivador. Rincones como el Golfo de Orosei, la jamesbondiana Cala di Volpe o la fotogénica Cala Luna son paradas imprescindibles en un recorrido costero.
2. Misterios con más de 5.000 años de antigüedad
Las nuragas de Cerdeña figuran entre las construcciones megalíticas más antiguas de Europa. Edificaciones con forma de cono truncado que alcanzan hasta los 12 m de altitud y que se caracterizan por una técnica constructiva cuanto menos sorprendente: las piedras van colocadas una sobre otra sin emplear ningún material para su fijación. En la isla se han localizado hasta 7.000 nuragas, siendo el de Su Nuraxi junto al pueblo de Barumini, uno de los más populares. Desde 1997 son parte del Patrimonio de la Humanidad.
3. 656 escalones que descienden a la Gruta de Neptuno
Desde lo alto del acantilado del Capo Caccia, a 25 km de Alghero, desciende una escalera tallada en la piedra con 656 escalones. Es la puerta de acceso a la Gruta de Neptuno y sus lagos interiores con más de 10 millones de años de antigüedad.
4. Il trenino verde atravesando bosques
¿Puede haber algo más romántico que viajar el tren? Los raíles de Il treninno verde se extienden a lo largo de 165 km entre Mandas y Arbatax. Atraviesan túneles, ascienden a lo alto de las montañas y exploran los boscosos paisajes del corazón de la isla en un recorrido inspirador.
5. Animales a pie de playa
En algunas zonas costeras de Cerdeña tienes que estar preparado para la magia. No hay otra forma de definir la sensación que produce toparse con un ciervo entre las dunas de Arbus o una tortuga caretta nadando a sus anchas en las aguas cristalinas que bañan este sistema dunar de más de 6 km2.
6. Un Parque Natural que fue una base submarina
Un archipiélago de siete islas y ocho islotes salpican de color el estrecho e Bonifacio, las aguas que separan Córcega de Cerdeña. En la actualidad, las islas forman parte del Parque Natural de La Maddalena, al que solo se puede acceder en verano y con autorización previa. Lo más curioso de todo es que hasta 2005 aquí se ubicó una base de submarinos de la OTAN de la que aún quedan en pie algunas de sus instalaciones.
7. Pueblos con encanto y un toque chic
Tan pronto puedes estar charlando animadamente con un pescador de Stintino como compartiendo terraza con alguna celebrity en las localidades de Olbia o Porto Cervo. Tanto si buscas el encanto de lo tradicional como un ambiente algo más exclusivo, en Cerdeña encontrarás un lugar hecho a tu medida.
